Skip to main content

El casamiento

Argumento

El protagonista de esta obra teatral es Iván Kúsmich, o Podkolésin, un consejero de tercera categoría que aún no ha logrado casarse.

En los dos actos de la obra la acción gira en torno a si Kúsmich consigue casarse o si permanecerá en su eterna soltería.

Abstracción

La obra da comienzo en la habitación de Podkolésin, quien mantiene una conversación con su criado acerca de si la gente se ha interesado por su inminente, pero inexistente casamiento.

Entonces, aparece Tecla Ivánovna, la casamentera, quien afirma poseer una excelente candidata para convertirse en su mujer: Ágata Tijónovna. En ese momento, Kochkarév, gran amigo del protagonista, entra en escena. Este está felizmente casado e insiste a Podkolésin para que siga sus pasos.

Después de una conversación un tanto cómica, ambos hombres llegan a la conclusión de que Podkolésin no debe esperar a casarse, debe hacerlo ese mismo día.

En casa de Ágata Tijónovna, esta se encuentra discutiendo junto a su confidente Arina Pantaleimónovna sobre los posibles pretendientes que ese día aparecerán en su puerta. Y resulta que son nada menos que cinco futuros candidatos a marido, muy interesados y distintos.

El acto segundo se abre con Ágata tratando de elegir el mejor marido de los cinco pretendientes, y tras mucho meditarlo, haber hablado con ellos, se decide por Iván Kúsmich.

El amigo de este, Kochkarév, presa de la emoción, no tarda en preparar al novio y ultimar los detalles para que la ceremonia se produzca lo más pronto posible. Pero, aún con la insistencia de su amigo, el agrado de la novia y un monólogo reflexivo acerca de la buena condición y felicidad que posee un recién casado, Iván Kúsmich desaparece.

Desnudando el libro

El gran tema de esta novela, y que se encuentra personificado en Iván Kúsmich, es el miedo al compromiso. El protagonista es un funcionario con buena reputación, de mediana edad y soltero. Y, aunque posee la intención de dar el paso, hecho que queda demostrado con su parlamento sobre la felicidad y la pareja, lo cierto es que al final no se atreve a dar el paso.

Kúsmich está solo en una habitación preparándose para casarse, con gran predisposición y conciencia, pero, presa del pánico, huye por la ventana, dejando a Ágata con el vestido de novia y las ilusiones rotas.

Ágata representa la esperanza de encontrar el amor, la ilusión de enamorarse y permanecer al lado del marido. En este sentido, resulta el contrapunto al carácter del protagonista. Los otros pretendientes simbolizan asimismo posturas diversas acerca del matrimonio.

Gevákin, por ejemplo, es el más inocente de los que se involucran para conseguir casarse con Ágata. Posee un carácter bonachón y sincero, aunque también un tanto abatido, cansado de buscar una mujer. Iaíchnitza, por su parte, es irrespetuoso y busca cierta imagen con su unión, por lo que no está interesado en Ágata en concreto, sino en sus cualidades.

Gógol juega con los pretendientes para elaborar una crítica social en clave humorística. El dinamismo teatral genera un ritmo muy rápido de lectura y el conflicto que posee Kúsmich crea la curiosidad necesaria para que el lector se mueva ágil entre las páginas.

Ambientación

Nikolái Vasílievich Gógol, 1809 – 1852, nació en el seno de una familia de cosacos en Poltava. Con diecinueve años se traslada a San Petersburgo donde consigue trabajo como funcionario público y empieza a darse a conocer en los círculos literarios.

En la década de los 30 publica sus primeras obras, con gran éxito. El inspector, obra incluida en este volumen, trata de la estupidez de la burocracia, hecho que conocía desde dentro.

Durante ese período se instala en Roma, donde permanece hasta 1848. Allí escribe una de las mayores novelas de la literatura: Almas muertas. Poco después se embarca en un viaje a través de Tierra Santa, y entró en contacto con un sacerdote fanático por el cual llegó a quemar parte de sus obras. A principios del año 1852 Gógol murió en Moscú al borde de la locura.

Su obra figura al lado de autores como Tolstoi, Turgueniev o Pushkin, gran amigo y crítico de su obra.

Frase reveladora

Cuando uno medita en las horas de ocio, llega a la conclusión de que, finalmente, debe casarse. Después de todo… ¿qué? Uno vive, vive, y total… ¿de qué le sirve?

Reflexión

Esta pieza teatral resulta muy corta, cómica y entretenida. Gógol demuestra su habilidad lingüística, así como un gran control sobre el espectador. Sin duda esta obra deja con ganas de más.

Es más que una recomendación para lectores que busquen una distracción breve pero divertida.

El casamiento

Autor

Nikolái Gógol

Edición

Alba, 2010

Páginas

296

ISBN

9788484285700

Valoración

El casamiento